El Tajín.
Si has probado la cocina marroquí seguro que conoces el famoso tajín,
( se pronuncia con la fonética francesa) es el nombre que le dan los marroquís a las cazuelas de barro donde se prepara un guiso de carne o pescado con trozos de patatas y diferentes verduras.
Está realizado en barro y los más conocidos son los elaborados en Salé, ciudad situada en la costa Atlántica, famosa por su cerámica.
Los verás siempre a las puertas de los restaurantes o en los chiringuitos a la orilla de la carretera.
A la hora de la comida te sentirás atraído por el humo que desprenden mientras los preparan sobre las brasas de carbón humeantes. No podrás resistirte a probarlos cuando levanten sus tapaderas y todos los aromas y sabores penetren por tu nariz. Partirás con tus dedos esas grandes patatas humeantes y esos trozos de carne guisada. Recogerás con el pan esa salsa deliciosa, comerás esas ciruelas pasas que llenaran de caramelo tu boca, todo con tu mano sin cubiertos ni platos y todos de la misma cazuela a la manera tradicional. Acabareis todos chupando vuestros dedos y disfrutando de la experiencia.
No tengáis prisa, tomaros todo el tiempo del mundo, estáis en Marruecos.